viernes, 9 de septiembre de 2011

Pretención


Extendí los dedos y no atinaba a saber
si era saliva, sudor o llanto.

Permanecí sentada, atenta, respirando despacio
para poder escuchar.

Una escarcha amontonada tocó mis pies,
eran sus ojos, rebotando,
jugando a llorar.


V

Morazán


Cayó la noche en la orilla de la calle
angustiada por su humedad de invierno,
yo la ví por la esquina de mi ojo izquierdo
y adiviné acaso, su corto destino
que se rompió con la última botella
de gusano que se me atravesó por la garganta.

Ya no llora el parque por la tristeza inmunda
que tienen las uñas de los sin tierra, de los sin raíz.

Abultada en el hombro del olvido,
aquellas hojas azules están ancladas en el vertedero
que tienen los callejones con tope.

lp.
Destino de bruja deshilachada
danzar con los ojos del hambre abiertos
bajo la lluvia, sin miedo alguno,
de perpetuar tu nombre
en lo más obseno de las botellas rotas
y los llantos de pájaros perdidos;
en la triste ciudad de los ignorantes y nostálgicos,
de los con miedo y los huyendo;
en la cual estamos ancladas por sus estatuas incoherentes,
iluminadas por su bombas tristes que celebran la sangre de no sé qué santo,
adornadas de sus árboles podridos de orín de chucho sarnoso,
de bolo festejando su profunda tristeza,
poblado vacío bañado en el lodo del ¨progreso¨,
entre la bulla del ¨vota por mí¨,
lloviendo por fuera y por dentro
y amarrar una escoba vieja a mis piernas
simulando yo,
                        volar.

V

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Inútil


Deshojar las palabras no es suficiente
hay que romper el peso de la sabia podrida
sin pretender invadir el bosque
de luz y sueño.

Me siento incómodamente a repasarme
y me delíneo el rostro ya tan ajado
por el llanto y por el llanto y por el llanto.

No logro penetrar tu corteza
solo asusto a tus pájaros.

Todo es siempre tan improbable,
tan poco posible.